Orlando “Landy” Mosqueda: La vida viaja en la música.

Orlando “Landy” Mosqueda: La vida viaja en la música.

Orlando "Landy" Mosqueda

Orlando “Landy” Mosqueda

La vida de mi amigo ha sido una aventura que viaja en la música, o quizás la música es una aventura que viaja en la vida de Orlando “Landy” Mosqueda.

Cuenta que en los comienzos, en su Cuba natal, tuvo que hacer música con equipos e instrumentos precarios; Viajar por carretera durante horas para hacer presentaciones ordenadas por algún jerarca y encontrarse con un único micrófono para la banda de diez integrantes. Se podrían escribir varios libros con anécdotas como esa.

Consigue entrar al privilegiado grupo de músicos que entretiene a los turistas y en los ratos de descanso aprovecha de escabullirse por los techos y a través de ductos de aire acondicionado para burlar la vigilancia que les asignan las 24 horas para cometer alguna travesura de juventud. Siente la represión que habita en todos los espacios por donde transita cuando se puede. Y sin  importar lo festivo que la música expresa hacia afuera siente que es un lamento triste de lo que se lleva por dentro; Sentir que la vida transcurre sintiéndose en prisión cuando desde la costa se ven las luces de algo distinto y libre. Había que pensar en algo. Y ése “Algo” era escapar.

Llega el día. Allí está el Mar Caribe. Él y otros más se arriesgan, navegan, las olas ayudan, la brisa favorece, los tiburones merodean, los guardacostas se acercan,  cruzan la línea imaginaria hacia aguas internacionales y el diminuto lanchón con cuatro jóvenes a bordo es interceptado por un gigantesco carguero cuyo capitán, fiel a los preceptos del marino, rescata.

De nombre impronunciable, el marino les ofrece alimentos y cobijas tibias pero “No es hacia las luces que vosotros véis hacia donde dirijo mi barco. Navego en sentido contrario, hacia el Sur. Las leyes marinas me obligan a dejarlos en el primer puerto que deba tocar y ése está en un país llamado Guyana Inglesa“– Les dice. Allí desembarcan y transcurrirá un año sobreviviendo y aún soñando con la libertad.
La aventura continúa, hay sujetos misteriosos, más mensajes: en la madrugada de tal día, listos, nada de equipaje, el sonido de un motor, una luz que hiere los ojos, ¡súbanse! y más órdenes en un maltrecho español del que parecía ser el jefe de otros tres contrabandistas cuyos rostros no se distinguen por la oscuridad absoluta en el mar. El viaje es veloz y atropellado, son veintitrés horas, no se controla la náusea, se distinguen manglares y la voz violenta del jefe de la embarcación grita: – ¿Saben nadar? – y antes de que respondan – ya están nadando en las aguas oscuras mientras la nave se aleja veloz hasta hacerse imperceptible el ruido del motor. Logran llegar a la costa del país que en esos tiempos aún era libre: ¡Venezuela!.

Música cubana

“Arsenio Essential”. Producción: Orlando Mosqueda

 

La vida cambió, hay esperanzas pero aún quedan muchas dificultades que superar. Llegan a Ciudad Guayana y pronto, a través de conocidos y familiares estarán en Maracay. Hace contactos con músicos y se ofrece como pianista por primera vez en su vida ya que sus instrumentos son inicialmente los de percusión y aunque tenía habilidades en el piano nunca había tenido esa responsabilidad.

El director le entrega las partituras y un reproductor de cassetes para que escuche y estudie los temas con un viejo teclado prestado. En tiempo record monta el repertorio, debuta con solvencia; queda como músico fijo en la banda, van y vienen shows y “tigres” (gigs) en varios lugares y ahora si se vislumbra una posibilidad de mejorar la vida.

“Only you can make a difference”. Producción: Orlando Mosqueda

Pero es el año 99 y el resultado de las elecciones presidenciales en Venezuela lo pone alerta. La posibilidad de que un ex militar golpista replique lo vivido en Cuba le inquieta. Hay que continuar el camino hacia el norte. Llega a México y atravesando la frontera por el Río Bravo llega a Texas, Estados Unidos. El destino es Miami y aún queda un trecho que recorrerá aterido de frío por carretera hasta el Sur de la Florida.

En Miami saborea la libertad como la soñó. Hay varios familiares y colegas. Se reanudan lazos, se extiende la red y consigue trabajo cuando en la ciudad abundaban locales para el bailador y existían varias orquestas. No hace falta recordar que el sur de la Florida es una “extensión” de Cuba en vista de la población de ese país que ha venido emigrando masivamente a Estados Unidos desde los años 80.

Oscar de León, artista a quien Landy” admira desde niño, al escuchar su trabajo lo invita a tocar con él como tecladista, pero al poco tiempo lo nombrará pianista y director de la orquesta de Miami con la que el sonero trabaja en todo Estados Unidos y otras partes del mundo. La aventura continúa.

Con el salsero venezolano trabaja en la producción discográfica “Así soy”, y el sonero le graba cuatro temas y uno de ellos, “Enamoraíto”, será el tema promocional del disco obteniendo su primera nominación a los Latin Grammy.

La lista de artistas y músicos con los cuales ha compartido y trabajado “Landy” es extensa pero podemos mencionar a Willy Chirinos, Francisco Céspedes, Barry White J.R, Luis Bofill, Amaury Gutiérrez, Gipsy Kings  y Adrianna Foster. Se desempeña indistintamente como pianista o percusionista, compositor y arreglista. Rey Ruiz, Gilberto Santarosa han grabado sus temas y es solicitado como productor musical.

“Cuba recalls Elvis”. Producción: Orlando Mosqueda

Cada uno de los trabajos en los que interviene tiene el sello de la labor bien realizada, de la creatividad, originalidad y profesional, cualidades que lo hicieron merecedor junto a Rodolfo Castillo, de un Latin Grammy al mejor álbum “Tropical contemporáneo” en 2007 por la producción del disco “Fuzionando” de Oscar de León donde se incluyeron tres temas de su autoría.

Además de los trabajos con Oscar de León, “Landy”  ha sido productor y arreglista de muchas grabaciones de excelentes artistas entre los cuales puedo destacar el disco de Hal Caveda, “Cuba recalls Elvis”, “Only you can make a difference” de Adrianna Foster y “Arsenio Essential” de Luis Bofill.

Yo he tenido el privilegio de contar con Orlando como arreglista y productor musical junto al compositor Vicente Viloria de mi disco “Cancionero Personal” y actualmente trabaja, también con Viloria, en el disco de mi amiga la cantante venezolana residente en Canarias, España, Anny Cauz del cual les estaremos dando noticias próximamente.

Quiero finalizar esta nota destacando la calidad humana de José Orlando Mosqueda, “Orlandito” como también lo llaman sus amigos, que para mí vale más que el talento, los premios y sus habilidades musicales. “Landy” pone en práctica las enseñanzas de su abuela: “Lo que no se puede hoy será mañana. Si no, la próxima semana”, añora la tranquilidad con la que se vive en su pueblo y mira la vida con bondad y sencillez, sin egoísmos. Ama a sus hijas, disfruta compartir lo que tiene, prepara un salmón digno de un chef profesional y tiene un sentido del humor indetenible.

En esta pequeña nota quise compartir con Uds apenas un poquito de la rocambolesca vida de mi amigo músico, artista, pianista, percusionista, compositor, arreglista, productor musical, pero sobretodo buena persona, Orlando “Landy” Mosqueda.

Jorge A. Quintero